Las empresas que se dedican a la venta de píldoras de yoduro en Estados Unidos reportan una alta demanda de este fármaco. Este escenario de produce en el contexto de la ofensiva militar de Rusia a Ucrania.
¿Por qué se han incrementado las ventas de píldoras de yoduro? CNN explica el 14 de marzo del 2022 que esto se debe al temor de la población a una posible lluvia radioactiva o a un ataque nuclear ya sea planificado o accidental, dado que Rusia se ha tomado las centrales nucleares de Ucrania y ha insinuado un posible uso de armamento nuclear.
Anbex es una de las empresas que fabrican estas píldoras y en su página web anuncian incluso el desabastecimiento de este producto: “Actualmente estamos sin existencias de los comprimidos de yoduro de potasio IOSAT de 130 mg y 65 mg”.
Troy Jones, vicepresidente de ventas y marketing de Anbex, indica que la empresa ha recibido pedidos de todo el mundo desde febrero que sumados hasta la fecha dan 15 millones de pastillas.
¿Cómo ayuda el yoduro contra la radioactividad?
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés) explican que cuando hay presencia de radioactividad se pueden liberar a la atmósfera grandes cantidades de yodo radiactivo (o radioyodo) que pueden respirarse, así como contaminar el agua, el suelo, las plantas y los animales.
“Aunque el yoduro de potasio en sí mismo no es dañino y es una sustancia química importante que necesita el cuerpo humano, los CDC dicen que el yoduro radiactivo puede dañar la tiroides, una glándula con forma de mariposa situada en la parte delantera del cuello que produce muchas de las hormonas que regulan el cuerpo”, señala el medio citado.
En resumen, la exposición alta a estas sustancias químicas puede provocar cáncer de tiroides. Las píldoras de yoduro trabajan para saturar rápidamente la glándula tiroides y evitar que absorba el yodo radiactivo.
No obstante, los CDC aclaran que las pastillas de yoduro de potasio “no son una cura para todo y no ofrecen una protección del 100% contra el yodo radiactivo”, pues un cápsula solo protege durante 24 horas.
Además, tomarla con frecuencia o en dosis más altas “no ofrece más protección y puede causar enfermedades graves o la muerte”.