Obras como el Hospital Rodríguez Zambrano y la vía Manta-Colisa retratan la lentitud con la que ha avanzado la reconstrucción en Manabí.
Transitar por las calles de Manta guarda una especie de dicotomía. Por un lado, grandes edificios, amplias zonas comerciales y mucho comercio.
Por el otro, en cambio, obras inconclusas y descuido gubernamental. Esta es una de las ciudades de Manabí que más rápido se reconstruyó y reactivó luego del terremoto. Julio Villacreses, representante de la Comisión Anticorrupción en esta provincia, dice que esto se debe a la pujanza de los mantenses y a la inversión privada.
Incluso, en estos años, la ciudad ha crecido hacia el occidente. En la nueza zona, la urbe tiene hoteles y edificios lujosos, centros comerciales, restaurantes y zonas de esparcimiento construidos con inversión privada.
Pero, con el terremoto, en Manta también se dañaron los servicios públicos, escuelas, el hospital, las calles y carreteras. Y en esas obras, que dependen enteramente de la inversión pública, en cambio, no hay avances.
Una de las deudas más grandes de los Gobiernos de Rafael Correa, Lenín Moreno y Guillermo Lasso con Manabí es la red hospitalaria.
Después de seis años, según la Comisión Anticorrupción, ningún hospital de la provincia funciona al 100%. Según las proyecciones del INEC,
Manta es la décima ciudad más poblada del país y la segunda en Manabí, solo detrás de Portoviejo. Pero ha tenido que solventar la pandemia del Covid-19 sin un hospital en buenas condiciones.
Tras el terremoto, el Hospital Rafael Rodríguez Zambrano fue declarado inservible y debió ser demolido. Pero, luego de nuevos estudios, se decidió utilizar la vieja infraestructura y hacer una obra de repotenciación por USD 25,9 millones.
La obra debió inaugurarse en enero de 2020, pero dos años después el avance es del 70%. Y mientras tanto los servicios de salud públicos se dan en una improvisada casa de salud, con cubículos y contenedores, que costó USD 3 millones.
La “construcción” de esa obra fue forzada por el Comité Cívico de Manta, porque cuando los trabajos de repotenciación en el Rodríguez Zambrano empezaron, se los hacía en medio de los pacientes y el personal médico.
Esta organización interpuso una acción judicial para frenar las obras y que se busque donde reubicar temporalmente los servicios.
Lucía Fernández de Genna, representante del Comité Cívico, dice que si bien el Gobierno asegura que la obra está cerca de concluir, el día a día dice otra cosa. “Hay pocos trabajadores, las obras no avanzan. Y no hay dinero para la equipación“. PRIMICIAS solicitó al Ministerio de Salud información sobre esta obra. Pero no hubo respuesta.
