Vingegaard tiene un plan para derrotar a Pogacar en el Tour de Francia

lunes, Jul 11

El danés Jonas Vingegaard, del equipo Jumbo Visma, segundo en la general del Tour de Francia a 39 segundos de Tadej Pogacar, señaló que el esloveno está «muy, muy fuerte», pero no abandona la idea de hacer algo grande y desveló que su equipo tiene «un plan» para las dos próximas semanas.

«Pogacar parece muy, muy fuerte, definitivamente es el hombre a batir. Su equipo también es muy fuerte, sobre todo en la montaña, lo han demostrado estos últimos días. Tenemos un plan, pero no lo desvelaré en directo por la tele. Sé que puedo hacer una buena contrarreloj, como Pogacar, pero no voy a confiar solo en ella al final», comentó el segundo clasificado en 2021.

«Vamos a intentar cosas en las próximas dos semanas. Si hay una etapa para ganar, probablemente elegiré la del Alpe dHuez. Es una subida especial en el Tour, siempre hay tanta gente…», añadió.

Hace un año, Vingegaard era el gregario de Roglic en el Tour de Francia, ahora es él el encargado de llevar los galones, el hombre de la general del Jumbo.

«Ahora tengo más presión, vengo al Tour como capitán y líder. No diría que es difícil ese papel, simplemente es diferente. Me estoy desarrollando en ese rol. El año pasado vine para ayudar a Primoz Roglic. El principal cambio está en la primera semana. No fue muy grave que perdí tiempo en la salida del año pasado, estaba más tranquilo. Este año, es todo lo contrario. Creo que estar a 39 segundos de Pogacar no está mal, puede pasar aún de todo», comentó.

Vingeaard recordó sus sensaciones de la salida del Tour el pasado 1 de julio de Copenhague, ante el fervor de sus paisanos daneses.

«La salida de Dinamarca fue realmente increíble, una de las experiencias más hermosas de mi vida, especialmente durante la presentación del equipo fue muy emocionante para mí, casi abrumador. Me imaginé que sería algo enorme, pero no tanto. Por supuesto, eso pone un poco de presión, pero la presión externa no me alcanza, solo cuenta la que me pongo yo mismo. Nunca he tenido problemas para mantener la presión», destacó.

Sobre la etapa de los adoquines, recordó con buen humor lo que sufrió cuando tuvo problemas mecánicos.

«Es mejor reír que llorar. Cometí un error. Se me salió la cadena y me quedé bloqueado. Debí detenerme y volver a ponerla, lo que hubiera sido mucho más rápido que cambiar de bicicleta cinco veces. Debió ser muy divertido verlo por la tele. Fue un gran trabajo del equipo, sin mis compañeros. estaría a cuatro minutos, me salvaron la clasificación general, estoy muy agradecido», aseguró.

Para activar las piernas tras la jornada de descanso, el Tour ha propuesto una etapa 10 de media montaña que se correrá entre los gigantes alpinos, escenario de las dos siguientes jornadas, y que tendrá un final explosivo el 12 de julio del 2022.

Los 148,1 kilómetros entre Morzine y Megve cuentan con dos puertos de cuarta, uno de tercera y un ascenso final a la meta catalogado de segunda, con 19,2 kilómetros al 4,1 % de pendiente media.

Será la culminación de una jornada que transita entre valles alpinos, mirando de reojo a algunos de los gigantes que se subirán en las próximas semanas, nombres míticos como el Télégraphe, el Galibier, techo de esta edición, el Granon o el Alpe dHuez.

En vista de lo que llega, la etapa puede jugarse de forma conservadora entre los favoritos y dejar abierta la puerta a una escapada.