Una persona murió en una región montañosa de Papúa Nueva Guinea, a raíz del fuerte terremoto de magnitud 7.6 que azotó en horas de la mañana en ese país, informaron el domingo 11 de septiembre de 2022 las autoridades.
La parlamentaria por la provincia de Madang, donde se ubicó el epicentro del movimiento telúrico, indicó en la red social Facebook que una mujer perdió la vida. El deceso ocurrió, tras un corrimiento de tierra provocado por el sismo y otras resultaron heridas.
La dificultad de acceso a esta montañosa región, ubicada en el noreste del país, complica las tareas de emergencia y rescate.
El terremoto se registró a las 9:46 hora local (23:46 GMT del sábado 10 de septiembre). Su epicentro de localizó a 63 kilómetros de la localidad montañosa de Kainantu, una zona bastante despoblada que se encuentra a unos 400 kms al noreste de la capital Port Moresby. Así lo informó el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que mide la actividad sísmica de todo el mundo.
El hipocentro del terremoto en Papúa fue localizado a 61 kilómetros de profundidad. El fuerte temblor cortó las comunicaciones con varias poblaciones.
En las redes sociales, los habitantes publicaron videos y fotografías de los daños dejados por el terremoto en Papúa. Grandes fisuras en algunas carreteras, autos destruidos por la caída de paredes y cascotes, así como edificios, quedaron afectados por el desastre natural.
La intensidad del sismo, que duró casi un minuto según los testigos, obligó al Servicio Geológico de Estados Unidos ha activar un aviso de posible riesgo de tsunami a 1 000 kilómetros del epicentro. La alerta fue levantada horas después.
El primer ministro, James Marape, calificó el terremoto de «masivo» e indicó que se temen importantes daños, al tiempo que precisó que de momento desconoce el alcance real de lo sucedido en varias zonas del país.
«Hemos pedido a las agencias de desastres nacionales y provinciales, así como a los líderes comunales, que evalúen los daños y las lesiones de las personas y las atiendan lo antes posible», dijo Marape durante una rueda de prensa retransmitida por la plataforma YouTube.
El Mandatario, quien se reunió con parte de los miembros de su Gobierno, precisó que se espera que las víctimas mortales sean en menor cifra a las del terremoto sucedido en febrero de 2018, cuando perdieron la vida más de 145 personas.
La isla de Nueva Guinea, cuya mitad occidental pertenece a Indonesia, se asienta sobre el Anillo de Fuego del Pacífico, una zona de gran actividad sísmica y volcánica que es sacudida al año por unos 7 000 temblores, la mayoría moderados.
