Un día después de que Luiz Inácio Lula da Silva ha sido elegido nuevo presidente de Brasil, los sectores del gremio de transportistas y camioneros más afines a Jair Bolsonaro han bloqueado varias carreteras y otras vías de acceso a las principales arterias alrededor de todo el país, en protesta por los resultados.
Se han confirmado más de 60 bloqueos y protestas en al menos doce estados, según los propios organizadores. En Río de Janeiro ha quedado interrumpida durante unas horas la principal carretera que conecta con Sao Paulo, la vía Dutra. Así como en otros lugares de Minas Gerais, Espíritu Santo, Rondonia, Santa Catarina, o Río Grande del Sur y Paraná, entre otros.
Líderes de las movilizaciones de 2018 y otras entidades de transportistas han condenado las paralizaciones de este lunes 31 de octubre. Se han apresurado a reconocer el resultado de las elecciones presidenciales con las que Lula da Silva volverá al Palacio del Planalto más de doce años después.
La Policía brasileña ha informado de que unas cien personas aproximadamente se han movilizado en Río de Janeiro para mostrar su «insatisfacción» con los resultados de las elecciones presidenciales por un supuesto «fraude».
Las autoridades han confirmado quema de neumáticos e incluso de algunos vehículos para impedir la libre circulación. En lugares como Mato Grosso ha afectado también al tránsito de ambulancias y camiones con animales vivos, cuenta el diario ‘O Globo’.
Este domingo 30 de octubre, Lula da Silva ha sido elegido nuevo presidente de Brasil tras imponerse a Jair Bolsonaro en una de las últimas elecciones más reñidas que se recuerdan en el gigante sudamericano.
El líder del Partido de los Trabajadores (PT) logró dos millones más de votos, el 50,9% de los mismos, que su rival, que más de medio día después todavía no ha reconocido su derrota.