El papa Francisco afirmó que cada niño explotado, marginado y abandonado es «culpa nuestra» por el sistema que los adultos han construido, en el vídeo mensaje que se publica cada mes con las intenciones de oración, esta vez para las de noviembre.
«Todavía hay millones de niños y niñas que sufren y viven en condiciones muy parecidas a la esclavitud. No son números: son seres humanos con un nombre, con un rostro propio, con una identidad que Dios les ha dado», comienza así Francisco su mensaje.
Y recuerda que «demasiadas veces olvidamos nuestra responsabilidad y cerramos los ojos ante la explotación de estos niños que no tienen derecho ni a jugar, ni a estudiar, ni a soñar. Ni siquiera tienen el calor de una familia».
«¡Cada niño marginado, abandonado por su familia, sin escolarización, sin atención médica, es un grito! Un grito que se eleva a Dios y acusa al sistema que los adultos hemos construido. Un niño abandonado es culpa nuestra», denunció.
El papa realizó un llamamiento para que «no se permita que se sientan solos y abandonados», pues «necesitan poder recibir una educación y sentir el amor de una familia para saber que Dios no los olvida».
«Recemos para que los niños y niñas que sufren, los que viven en las calles, las víctimas de las guerras y los huérfanos, puedan acceder a la educación y redescubrir el afecto de una familia», concluyó.
Los vídeos del papa son una iniciativa que nació durante este pontificado y que tiene como objetivo difundir las intenciones de oración mensuales del pontífice y es desarrollada por la Red Mundial de Oración del papa.