Se realizó un operativo conjunto entre el Ejército, la Policía Nacional y el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y Adolescentes Infractores (SNAI) para trasladar a 665 hombres y 528 mujeres entre los centros penitenciarios de Cotopaxi y Tungurahua, con el fin de cumplir con normativas internacionales que exigen la separación por género en las cárceles.
Durante el traslado, Mayra Salazar, condenada por el caso Metástasis y asociada a una trama de corrupción, fue reubicada de la cárcel de Cotopaxi a la de Tungurahua, en un vehículo blindado debido a su alto perfil de riesgo.
El operativo, que también incluyó la incautación de un objeto prohibido, es parte de una estrategia más amplia para reorganizar las cárceles, mejorar la seguridad y las condiciones de los internos.
Según el SNAI, el traslado obedece a una resolución de 2023 que busca adecuar los centros de privación de libertad a las normativas internacionales y evitar crisis internas, como lo destacó el general Medardo Calero Silva, encargado del despliegue militar.